Apple ha Apple de agregar tiendas de aplicaciones de terceros y de carga lateral al iPhone.
Para cumplir con la histórica Ley de Mercados Digitales (DMA) de la UE, Apple dice que permitirá a los desarrolladores utilizar otros motores de navegador para sus navegadores web. Eso significa que Apple ya no los obligará a usar su propio motor de renderizado WebKit, que es la tecnología subyacente detrás de lo que cualquier navegador web puede hacer en su teléfono. Ese es un cambio masivo de reglas.
Estropear deliberadamente la experiencia de navegación
Los proveedores de navegadores como el desarrollador de Chrome, Google, y el fabricante de Edge, Microsoft, se han visto restringidos a crear meros shells en torno a una versión muy específica y sin modificar de WebView de Safari, un componente cuyas funcionalidades están estrictamente dictadas por Apple. En lugar de enviar sus navegadores meticulosamente desarrollados, empresas como Google y Mozilla se ven obligadas a construir un navegador separado que esencialmente actúa como un envoltorio delgado para el motor WebKit de Apple.
En pocas palabras, las aplicaciones de navegador como Chrome, Firefox, Brave, DuckDuckGo y otras se pueden instalar en un iPhone, pero simplemente sirven como superposiciones superficiales en el motor WebKit de Apple. Esta política también significa que Apple tiene la última palabra sobre qué funciones son compatibles con Safari. Y esa brecha de características es enorme.
Basta con echar un vistazo a esta comparación de características compilada por Open Web Advocacy para comprender el problema:
Los proveedores de navegadores de terceros no tienen otra opción que utilizar una versión muy específica de WebKit, sin flexibilidad para modificar las características del motor, incluida la activación o desactivación de las funciones existentes en el código fuente. Esta limitación ahoga la capacidad de los navegadores iOS para destacarse.
Por otro lado, en un mercado con opciones de navegador genuinas, los terceros podrían desarrollar sus propios navegadores desde cero. Basta con echar un vistazo a lo que la gente detrás del navegador Arc ha logrado lograr al reimaginar totalmente cómo se ve y funciona un navegador en el ecosistema de escritorio.
También es revelador que un equipo con mentes tan brillantes solo haya lanzado una aplicación complementaria de Arc en iOS y no un navegador móvil revolucionario en toda regla, porque saben muy bien que no obtendrán el mismo tipo de flexibilidad con iOS (debido a WebKit) que en macOS para crear un fantástico navegador de escritorio.
Esto también es evidente en el ecosistema del navegador Chromium. A diferencia de iOS, donde Apple controla únicamente la inclusión de funciones, los proveedores de navegadores tienen la libertad de elegir funciones cuando usan Chromium en Android. En última instancia, para un promedio de iPhone, el aspecto clave es el software que funciona en dispositivos reales.
Se trata de un trato preferencial
Pero no es solo la falta de características lo que preocupa. También se trata de darle a Safari una ventaja injusta porque Apple controla toda la implementación de cualquier navegador que se ejecute en el iPhone. Apple, por supuesto, da un trato preferencial a Safari cuando se trata de acceder al sistema nativo en iPhones.
A Safari se le ha otorgado la capacidad de mostrar videos en pantalla completa, mientras que otros navegadores tienen prohibido hacerlo, excepto en iPad. Históricamente, también se ha impedido que otros navegadores instalen aplicaciones web, utilicen las extensiones demasiado importantes o integren Apple Pay en la misma medida que Safari.
A continuación, exploremos la perspectiva de la competencia, que es lo que finalmente obligó a la UE a investigar la situación de WebKit. Este enfoque exclusivo de WebKit obliga a las empresas a crear múltiples aplicaciones distintas para cada plataforma, lo que aumenta significativamente los costos y las complejidades de desarrollo y mantenimiento. Estos costos se suman al impuesto del 15% al 30% de la App Store, que Apple ha protegido tan ferozmente hasta la fecha.
Los costos exorbitantes de desarrollar una aplicación interoperable que funciona de manera idéntica a lo que Apple tiene para ofrecer hacen que solo sea factible para empresas bien financiadas. Después de todo, ¿por qué alguien querría ofrecer un navegador que funciona prácticamente igual que un Safari, y al mismo tiempo estar en desventaja técnica? Naturalmente, muchas aplicaciones útiles o potencialmente rentables nunca ven la luz del día.
Vaya. ¿He dicho que Safari tartamudea?
Safari y WebView de Apple a menudo encuentran errores críticos que pueden romper las aplicaciones, y estos problemas también afectan a los navegadores iOS de la competencia, ya que no pueden usar sus propios motores, que pueden no tener estos errores. Echa un vistazo a este gráfico de fallos llamado de pruebas de plataformas web y maravíllate con los fallos de Safari:
HTTP Toolkit tiene un catálogo masivo de cómo el enfoque de Apple no solo permite que los errores del navegador persistan en la web y debilita las medidas de seguridad cruciales, sino que también está enturbiando la web en general para todos los que tienen un iPhone en la mano. Eso es particularmente condenatorio para una empresa que siempre argumenta en contra del cambio citando la privacidad y la seguridad.
Si realmente quieres entender cuán terriblemente Apple ha creado un monopolio de navegador en el iPhone, uno en el que ha ahogado la innovación de características y ha permitido que persistan los problemas persistentes, lee este documento completo de 108 páginas llamado «Bringing Competition to the Walled Gardens – Third Party Browsers & Web Apps«.
Pero ahora que la UE ha forzado la mano de Apple y la compañía finalmente permitirá motores alternativos como Gecko y Blink, finalmente veremos una nueva experiencia desarrollada en Chrome, Edge y Firefox ejecutándose en el iPhone. Y eso podría suceder pronto.
Un futuro brillante está a la vuelta de la esquina
A principios de este año, Google anunció (a través de GitHub, de todos los lugares) que estaba trabajando en una versión experimental de Chrome para iOS con el motor Blink en su núcleo en lugar de WebKit. Por supuesto, las políticas de Apple nunca permitirán una monstruosidad tan liberadora en la App Store, pero es como si Google tuviera un indicio de que la UE podría obligar a Apple a revertir el rumbo. La gente de 9to5Google incluso consiguió una versión rudimentaria que funcionaba en un iPhone.
Mozilla también ha estado probando una versión de Firefox para iOS construida sobre su motor de renderizado Gecko. «Cumplimos con las políticas de la tienda de aplicaciones iOS de Apple, y simplemente estamos haciendo un trabajo exploratorio para comprender los desafíos técnicos para los navegadores basados en Gecko en iOS si esas políticas cambiaran», dijo Mozilla a The a principios de este año.
Parece que los experimentos de Google y Mozilla con navegadores web móviles libres de los grilletes de Apple WebKit finalmente darán sus frutos. Pero solo para los habitantes de la UE. Espero sinceramente que, por el bien de sus valiosos clientes, Apple haga lo mismo por los s de todo el mundo. No tiene precedentes, pero al final del día, también es mágico para un promedio de iPhone cansado de la experiencia insípida de Safari.
También espero sinceramente que los reguladores de otros países también puedan lograr lo que la UE ha logrado. Soy irremediablemente adicto a la causa del «iPad como computadora», pero mi peor enemigo ha sido el conjunto de funciones limitadas en los navegadores web. Rezo por un día en el que pueda usar Chrome en el iPad Pro al menos a la mitad de las capacidades que tiene en los navegadores de escritorio.
¡La pelota está en tu cancha ahora, Apple!
